Ficha de crustáceo
La hembra Bogavante pone muchos miles de huevos, normalmente una vez cada dos años, y las diminutas crías nadan y se dejan llevar por las aguas durante un periodo de hasta cinco semanas antes de asentarse en el fondo. Los Bogavante pueden llegar a vivir hasta 50 años, su crecimiento es lento y al igual que otros crustáceos lo realiza con mudas regulares de su caparazón, que disminuyen en frecuencia según se va haciendo adulto. Los Bogavante se alimenta de sepias, pulpos, calamares y pequeños peces.
Las dos especies que se comercializan se consideran un manjar delicioso y son importantes para la pesca comercial de América y Europa. Fuera de España se les suelen denominar langostas.
COMO RECONOCERLO.- Es un crustáceo marino decápodo. Posee cinco pares de patas, cuatro de las cuales están situadas en el tórax. El primer par de patas termina en dos grandes pinzas. Posee dos largas antenas y otras cuatro mucho más cortas. De cuerpo robusto y alargado. El tronco es liso. El abdomen tiene siete anillos y la cola es en forma de abanico. Presenta coloraciones verdosas, marrones, negras o azules.LLa hembra se caracteriza por tener unas pequeñas patas atrofiadas, situadas después del último par de patas. Una curiosidad es que las dos pinzas principales del animal cumplen una función diferente: mientras que la más gruesa (normalmente la izquierda) es utilizada para triturar, la derecha, más fina, es una precisa herramienta de corte. La primera parece resultarle de mayor importancia, y en el caso de que la pierda, en la siguiente muda la pinza de corte se transforma en una gruesa, y la que regenerará poco a poco con las mudas sucesivas será la fina. Con ello, el animal pasará a ser diestro cuando era inicialmente zurdo.
Reproducción.- El apareamiento se produce a finales del verano. Los huevos que se generan quedan sujetos a los apéndices de la hembra, produciéndose la incubación, que durará de 9 a 10 meses. El número de huevos varía entre 5 y 30 mil. Cuando eclosionan originan larvas pelágicas que, después de sufrir 3 mudas, dan paso a un adulto.
La hembra pone muchos miles de huevos, normalmente cada dos años, y las diminutas crías nadan y se dejan llevar por las aguas durante un período de hasta cinco semanas antes de asentarse en el fondo. Pueden llegar a vivir más de 50 años, su crecimiento es lento y al igual que otros crustáceos lo realiza con mudas regulares de su caparazón, que disminuyen en frecuencia según se va haciendo adulto.
Para la reproducción precisan temperaturas no inferiores a los 15°C. y salinidad alta. El apareamiento se realiza a finales del verano, inmediatamente después de la muda de las hembras. El macho emite espermatóforos formando un paquete seminal que es conservado por la hembra en el receptáculo seminal durante todo el invierno. La fecundación y la puesta no tiene lugar hasta el verano siguiente, con su máximo de intensidad a finales de julio y principios de agosto. Los huevos, en un número de 5.000 a 30.000, permanecen pegados al abdomen de la hembra durante 10 ó 12 meses, según la temperatura. El apareamiento no se realiza más que una vez cada dos años.
Las larvas nacen al estado mysis que es el más adelantado de los estados larvarios de los crustáceos, pasando luego por los estados post-larvarios. Al nacer miden unos 6-7 mm. de largo y nadan durante cierto tiempo, que puede ir de dos a tres meses, según sea la temperatura de las aguas. Durante la fase pelágica efectúan tres mudas, luego de las cuales adoptan forma de adulto y comienzan su vida bentónica. Al comenzar la vida bentónica la post-larva de bogavante muda ocho veces antes del invierno, alcanzando una talla de 3 cm. El crecimiento que al principio es muy rápido, se hace luego más lento, variando mucho con la temperatura. El número de mudas al año se va reduciendo luego con la edad. Suele medir unos 5 cm. el primer año y 20 cm. a los cuatro años. Realizan dos mudas al año hasta que llegan a la madurez, a los cuatro o cinco años. Las hembras adultas solo mudan una vez cada dos años. En cada muda se calcula que el bogavante crece un 15% sobre la longitud anterior.
El primer par de apéndices abdominales de la hembra son más pequeños que el resto. En el macho los dos primeros pares de patas abdominales están transformados para ayudar a pasar los espermatozoides a la hembra. Éstas se distinguen muy bien porque las uñas del último par de patas torácicas están bifurcadas, al igual que las de las hembras de langosta.
La variedad europea (Homarus gammarus) y la especie americana (Homarus americanus) se diferencian claramente por su color, siendo éste negro azulado con manchas claras en la europea y rojizo en la americana. También se diferencian por su abundancia. De hecho, la mayoría de los que se encuentran en los mercados para el consumo humano proceden del Atlántico occidental, ya que la especie europea es mucho más escasa.
Muy conocido también como llubricante, este marisco es de los más tradicionales y apreciados, además del Cantábrico, se comercializan ejemplares de dos principales procedencias: Canadá y las Islas Británicas. Aún siendo un experto resulta difícil diferenciar el bogavante Cantábrico del británico dada su enorme similitud ya que ambos pertenecen a la misma especie.
Sin embargo, si es relativamente fácil distinguir estos del canadiense, pues presenta una coloración ocre mucho más extendida en la parte baja del caparazón y nunca llega a ser tan oscuro como el de Cantábrico o el británico, en los que, por otra parte, las coloraciones azules son evidentes, mientras que en el canadiense son prácticamente inexistentes. Después de cocido, el bogavante al igual que otros muchos mariscos, se torna rojizo, adquiriendo un tono más intenso en los ejemplares Cantábricos y británicos que en los canadienses.
Bogavante americano Homarus americanus
También es conocido como bogavante canadiense. Su color es rojizo. Su carne no llega a tener la calidad de las especies europeas.
La cabeza, más pequeña y picuda, las pinzas más grandes, el color pardo oscuro o marrón y la ausencia de pintas blancas del bogavante procedente de Canadá, también son otros elementos útiles para su diferenciación.La mayoría de los que se encuentran en los mercados para el consumo humano son de esta procedencia aproximadamente en España el 95%.
QUE COME.- Típicamente nocturno, sale de noche a buscar alimento, que se compone de gusanos, bivalvos y peces muertos.Es exigente en cuanto a la temperatura del agua, pues deja de alimentarse si es menor de 5°C y muere a más de 20°C.Puede ser caníbal, y ese es uno de los motivos por el que se le atan las patas en los viveros.
DONDE VIVE.- Vive en fondos rocosos entre los 2 y los 50 metros de profundidad. En temperaturas entre 15 y 22 grados. Habita en fondos de arena y roca, aprovechando grietas y cuevas. Es una especie habitualmente solitaria, agresiva y de hábitos nocturnos.Muy a menudo el congrio comparte cueva con el bogavante ya que hacen buena sociedad, siendo dependientes el uno del otro, al igual que el camarón. Donde está el bogavante, camarón o santiaguiño, es raro que no esté el congrio. El pulpo es uno de los principales depredadores del bogavante y el congrio se alimenta de pulpos.El gran peso del caparazón impide nadar a los bogavantes, pero en cambio les es útil para resistir los embates del oleaje en las costas arenosas, donde pasan el tiempo bajo piedras o en oquedades; durante la noche salen de su escondite y recorren los fondos cazando su alimento.Se encuentra en el este del océano Atlántico, desde las islas Lofoten, en el noroeste de Noruega, hasta Azores y Marruecos. Mar Negro y en algunas zonas del Mediterráneo.
INDICACIONES PARA LA PESCA.- El bogavante europeo es por lo general capturado con un tamaño de 23-38 cm y un peso de 0,7-2,2 kg, pero los ejemplares de edad pueden ser de 60 cm de largo y pesar 9 kilos.Las técnicas de pesca más empleadas son las nasas, en especial, la llamada “nasa langostera”, cebada con peces y situada en las rocas frecuentadas por estos crustáceos. Otras utilizadas, aunque en menor medida, son las de arrastre, trasmallo, miños (también denominados rascos) y raeiras o arte de enmalle.
Puede presumir de ser el crustáceo más grande, especialmente, en las especies de mayor edad, por ejemplo en 1931 una de 1,26 m de largo y un peso de 9,3 kg fue capturada en Cornualles. Se había estimado que pueden vivir unos 50 años y recientemente se sabe que viven más de 100 años. Un bogavante capturado en Terranova, Canadá, pesaba 9 kg y tenía unos 140 años, y estuvo a punto de ser cocinado en el restaurante "City Crab and Seafood" de Nueva York.
CURIOSIDADES: Se han realizado varias experiencias de cultivo, aunque de momento no están consolidadas. El desarrollo embrionario de los huevos en las hembras se sitúa entre los cinco y los seis meses, y una semana antes de que los huevos comiencen a eclosionar, la hembra se aísla en un compartimiento individual. El mismo día de la eclosión, y para evitar la posible voracidad de la hembra y que las larvas dispongan de alimento desde el primer momento, éstas se retiran y se pasan a tanques de cultivo larvario. Las mayores dificultades estriban en el estadío III del período larvario, que suele tener una duración aproximada de 12-15 días, donde la mortalidad puede oscilar entre el 20 y el 80%.